Elías terminó en medio de una crisis severa después de haber proclamado su fidelidad a Dios. El pensó que era el único profeta en Israel fiel a los principios de Dios.
Tal vez esto lo llevó a sentirse angustiado y falto de sabiduría. En el instante que le dio paso al temor, su fe empezó a flaquear. Cada vez que oímos a la voz del temor, nuestra fe se debilita y terminamos vulnerables a los ataques del enemigo. Se hace dificil oir la voz de Dios si la barrera de los pensamientos de temor se interpone.
En vez de celebrar lo que el poder asombroso de Dios había logrado, Elías huyó.Sin embargo, el Señor no lo abandonó, de la misma manera que no lo abandonará a usted.
Enfoque su corazón en Dios y busque al Señor para cumplir con su voluntad. Pídale confirmación de las palabras que pone en su corazón y asegúrese de seguirlas, siempre a la luz de las Sagradas Escrituras.
No ponga en riesgo la fe que Dios le ha dado.Cuando Elías finalmente sucumbió ante el Señor, sacó todo lo que había en su corazón. Dios, le dijo: "Qué haces aquí Elías?-I Reyes 19:9. En otras palabras: "acaso no has aprendido que Yo soy el Dios todopoderoso y te protejo de todo mal? La sabiduría confía en Dios en cualquier situación y reposa en el cuidado soberano y eterno del Señor.
No sé cual será su problema, o duda con el Señor. Quizás no ha entregado su mal carácter, y piense "yo nací así, y así me quedo"-o piense que Dios se ha olvidado de usted. Pero déjeme decirle que Dios tiene una respuesta para usted y actuará cuando El lo considere.
Recuerde lo que dice Proverbios 28:27 "Solo un necio confía en sus propias ideas, el que actúa con sabiduría saldrá bien librado".
Su amiga y hermana en la fe de Cristo Jesús,
Hellen Peralta