EL PRECIO DE NO ORAR


Alguna vez ha considerado el hecho de que cada uno de nosotros paga un precio al no darle a la vida de oración la importancia que merece? Claro está, no  hablamos de un precio económico, se trata de un precio espiritual.

Cuando fallamos en hacer de la oración una prioridad, especialmente descuidadndo nuestro tiempo a solas con Dios, comenzamos a sentir un vacío en nuestras vidas y una sensación extraña de intranquilidad e inconformidad. Sucede lo contrario cuando nuestra ida de oración es activa, el peso de estas cargas será levantado de nuestros hombros por la mano poderoso de Dios.  
Con esto en mente, por qué alguien escogería dejar de orar? La triste realidad es que muchos de nosotros nos acostumbramos tnto a las preocupaciones y tribulaciones que nos sentimos extraños sin ellas. Sin embargo, si continuamos alimentando este estilo de vida, comenzaremos a confiar en nosotros mismos en lugar de Dios, y por lo mismo nos volveremos vulnerables y quedaremos a expensas del desastre.

La solución eficaz para evitar estas dificultades, es tener como prioridad la comunión y comunicación con Dios.Despúes de todo, debemos estar en contacto con nuestro Padre Celestial   con miras a oír Su voz, entender y seguir Su voluntad.

Si le ha permitido a la distancia interponerse entre suted y el Señor, confiésele eso hoy.Cuando renueve su vida de oración, el precio más importante de su andar cristiano, será,capaz de experimentar la bendición de Dios y lo mejor de El en su vida.

Le insto a que tome tiempo para conocer Su padre, su protector y El que lo redimió, despúes de todo El desea que tener comunión, para que sepa como actuar y como seguir viviendo sanamente, ricamente y espiritualmente feliz.

Su amiga y hermana en la fe en Cristo Jesús.

Fraternalmetne,