Isaías tuvo una experiencia tansformadora al ver al Señor sentado en sus trono.La visión del cielo debe haber penetrado en lo más profundo del corazón del profeta, pues él exclamó:"porque siendo inmundo de labios...han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos-Isaías 6:5.
El primer paso para tratar con el pecado es descubrir quién es Dios. Cultivará una reverencia ppor El al estudiar las Sagradas Escrituras y al comprender su voluntad divina. Aprenderá que Dios merece todo su respeto y adoración. Al igual que Isaías, se postrará en humildad ante la santa presencia del Señor y reconocerá que usted es inmundo. Y antes de que el desánimo se apodere de usted, se dará cuenta que Dios lo ama a pesara de todos sus pecados.
Isaías comprendió este amor por medio del carbón ardiente que tocó sus labios y lo limpió de toda iniquidad. Hoy sabemos que Diois nos mostró su amor y nos limpió de toda maldad por medio de la sangre de Jesucristo derramada en la cruz del Calvario. La crucifixión y la resurrección de Cristo son manifestaciones majestuosas de la santidad y el poder de Dios.
Y si Dios nos llama a ser santos porque El es santo, es debido a que quiere que experimentemos su amor en su máxima expresión.
Le animo en el nombre de nuestro Señor Jesús, a vivir una vida limpia de pecado, santa agradable para Dios, quien a través de su Hijo Jesús, dio la vida en el Calvario por ti y por mi.
Bien dice la Sagrada Palabra que sin santidad nadie verá a Dios. Si tú puedes ser santo en este mundo perverso, Si podemos ser santos, porque ser santo es ser apartado para y por el servicio de Dios.
Fraternalmente,
Su amiga y hermana en la fe en Cristo Jesús,
Hellen Peralta